Los jubilados se pasan al trabajo voluntario
Fecha: 14.02.2012 | Fuente: www.deia.com
Bolunta constata el aumento de personas que tras finalizar su vida laboral dedican tiempo a los demás.
Varios ancianos ajenos a la información conversan en un banco. Mikel Saiz.  

Cuenta Nerea Díez, responsable del servicio de intermediación de Bolunta, la agencia para el voluntariado y la participación social, que el año pasado se les presentó una maestra jubilada de 84 años que quería ayudar en algo relacionado con el mundo de la educación. Su hija, que le acompañó a la reunión, le convenció para que desistiera de la idea. No se quedó muy convencida, pero aceptó la recomendación de su hija. Y para agradecerles la información, al día siguiente volvió, esta vez sola, a la sede de Bolunta con una caja de bombones. El caso de esta señora ha dejado de ser una excepción. Cada vez son más las personas mayores, sobre todo recién jubiladas, que deciden dedicar parte de su tiempo libre a labores de voluntariado. Según el último informe realizado en Bizkaia sobre este tema, el 32% del voluntariado supera los 60 años, pero ese tanto por ciento va en aumento. "Muchos jubilados han decidido pasar de vigilar una obra a involucrarse en el voluntariado", señala Nerea. Así que no es de extrañar que desde hace un par de años se haya creado el premio Abuelo Actual, que reconoce la labor social de las personas mayores, cada vez más activas.


"Es una tendencia creciente. La edad del voluntariado cada vez es mayor". Esta es la impresión que tienen en Bolunta a pesar de que no disponen de datos exactos porque el último estudio sobre el voluntariado se hizo en 2008. Lo han podido comprobar en sus oficinas de la calle Ronda del Casco Viejo, ya que cada vez son más las personas que se acercan en busca de información. "El 90% de la gente que viene hasta aquí lo hace a través del boca a boca", dice Nerea. Y una vez que entran en contacto con Bolunta, les asesoran sobre la posibilidades de colaboración que pueden desarrollar en las diferentes ONG de Bizkaia. "En estos momentos hay 242 programas abiertos a la participación de cualquier persona", comenta Natxo Arnaiz, director de Bolunta. "Eso no significa", prosigue, "que si alguien viene y dice que quiere colaborar en alguna actividad que no está contemplada en nuestra base de datos, se quede sin nada; nosotros nos comprometemos a buscarle algo".


Actividades El abanico de posibilidades para dedicarse al voluntariado son tan variadas como numerosas. "Siempre hay algo en lo que se puede colaborar", dice Nerea. Y enumera algunas: "Acompañamiento a personas mayores, actividades de tiempo libre, deportivas, castellanización, dinamización de actividades culturales o artísticas con colectivos determinados, recuperación de personas, trabajo con enfermeros, presos...". Nerea insiste en que "siempre hay un hueco para cualquier persona que quiere dedicar un tiempo a los demás de acuerdo a sus posibilidades".


"La gente viene muy dispuesta y abierta", señalan los responsables de Bolunta. Aunque también se encuentran los casos de personas que han trabajado en la banca, por ejemplo, y dicen que quieren colaborar en algo "pero que no tenga nada que ver con los números".


El aumento de la personas jubiladas que se suman al voluntariado se debe, según Nerea, a que "la gente está llegando a la jubilación en mejor estado de salud y con más ganas de participar activamente en labores sociales". "Antes se vivía la jubilación", interviene Natxo, "como una etapa de restricciones y hoy se vive como una etapa llena de oportunidades". Y entre esas oportunidades, además de cultivar los hobbies, los viajes, y el disfrute de la familia, "también adquiere importancia el voluntariado".


En Bolunta destacan que las personas mayores "son gente con experiencia y muchas cosas que aportar a la sociedad". Además tienen un valor añadido y es que "su grado de compromiso, de seriedad e intensidad es más fiable que el de las personas más jóvenes, cuya participación está más supeditada a lo académico y laboral".


En cuanto al perfil de los voluntarios, según el estudio, "existe un equilibrio entre sexos, pero prevalece una mayor porcentaje de voluntariado femenino, y de forma notable en los proyectos de carácter social, donde casi alcanza un 70%". En la única parcela donde predomina la presencia masculina es en el voluntariado deportivo y cultural. .


Jóvenes Los jóvenes, según el estudio, son minoría (7%) en cuestiones de voluntariado. Pero tanto Nerea como Natxo coinciden en que es un dato engañoso. "Es un voluntariado que participa mucho en temas deportivos, de tiempo libre y apoyo escolar", señalan, "el problema es que sus colaboraciones son más cortas o más efímeras por estar inmersos en los estudios o en la búsqueda de empleo". "La sociedad tiene un reto", dice Natxo, "y es que tenemos que sensibilizar y predisponer más a los jóvenes para tener una participación más activa en la sociedad". Aun así, Nerea recuerda que "los jóvenes participan mucho, aunque no en el marco de una asociación".


Sean jóvenes o mayores, el nivel de satisfacción de los voluntarios es muy alto. "En el 80% de los casos, la gente valora la experiencia como satisfactoria o muy satisfactoria", apunta Nerea. Y aunque ellos, desde Bolunta, no hacen un seguimiento del trabajo que desarrollan los voluntarios, "porque nosotros solo nos dedicamos a poner en contacto a las personas con las asociaciones", las impresiones que les llegan son muy buenas. La satisfacción de Nerea y Natxo es plena cuando una persona se acerca hasta Bolunta y les dice que quiere colaborar en algo. "Eso refuerza el sentido del trabajo que hacemos", dice Nerea. Como cuando se presentó la maestra jubilada, que se tuvo que volver a casa persuadida por su hija. Pero otros han ido y se han enganchado al voluntariado.