Varios medios -entre los que se encuentran Cadena Ser, Público o El
Economista- publican hoy una información sobre el ahorro que suponen
las actividades de la Iglesia para el Estado.
Entre estas actividades, mencionan al voluntariado. Así lo recoge el diario Público en su edición digital:
Un informe de los obispos defiende que el Estado les
adeuda entre 20.000 y 50.000 millones al año por su labor social. Su
documento calcula que deberían ingresar 600 millones extra por el IRPF.
(…) El informe justifica así esta demanda: “Este ahorro es debido a la
gran presencia de la actividad del voluntariado y a los niveles de
austeridad en los que se mueven las diócesis y parroquias”.
Ante estas declaraciones, la Plataforma del Voluntariado de España
(PVE) quiere recordar que el voluntariado no debe ni puede usarse para
reducir costes. La PVE es una plataforma que agrupa a 77 organizaciones
y plataformas de voluntariado de toda España, entre las que se
encuentran entidades aconfesionales y organizaciones católicas como
Cáritas.
Con este comunicado, queremos invitar a que tanto la Iglesia como
los medios maticen esta información: el voluntariado ni es gratuito ni
debe usarse como una forma de reducir costes, fomentar el trabajo
precario o sustituir empleos.
El voluntariado es una manera de participación ciudadana en que las
personas comprometidas por un mundo más justo contribuyen a cambiar
situaciones de exclusión ejerciendo de esta forma un papel responsable
y activo en la sociedad. Promovemos el voluntariado para fomentar la
cohesión social y como una opción óptima de reivindicar la justicia
global.
No tiene que confundirse como una forma de trabajo precario o una
manera de “quitar” puestos de trabajo. El voluntariado genera empleo
para quienes lo gestionan y para las personas que se atienden en
programas de promoción de empleo apoyados por voluntariado.
Las organizaciones producen beneficio social
La intención de la Iglesia con esta información es justificar el
dinero que solicita comentando el beneficio produce. Precisamente,
también las organizaciones sociales (tanto aconfesionales como
religiosas) realizan proyectos subvencionados por el Estado que
benefician a toda la sociedad promoviendo la participación ciudadana en
las políticas públicas y la lucha contra la exclusión.
Actualmente, cuatro grandes redes de ONG de España coordinan la campaña “Marca fines sociales”
animando a la ciudadanía a destinar parte de la recaudación de la Renta
a este tipo de proyectos. La campaña aclara que es posible marcar tanto
la casilla de fines sociales como la de la Iglesia sin que eso acarree
costes al contribuyente.
El dinero recaudado a través de esta vía se destina íntegramente a
proyectos, no a mantener las estructuras de las organizaciones.
Estos son los enlaces a las noticias publicadas en los medios:
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