Luis sabe contar cuentos. Ana domina la informática. No se conocen, pero ambos se apuntan en un registro oficial en el que todas las personas dejan constancia de sus habilidades o, simplemente, de lo que podrían hacer por los demás. Un día, Ana necesita que le cuiden a sus hijos durante dos horas. Lo comunica y a su casa llega Luis para entretener a sus chavales totalmente gratis. Ana debe esas dos horas al sistema. Quizá dentro de poco reciba una llamada porque alguien en la ciudad necesita que le arreglen su ordenador. Así cubrirá su deuda.

Este es un simple ejemplo del denominado banco del tiempo, una iniciativa solidaria estrenada ya en varios países o en ciudades como Barcelona, Bilbao o Sevilla que se basa en intercambiar habilidades. Todas las actividades tienen el mismo valor. La única medida es el tiempo que se tarda en hacer algo. Las acciones, por tanto, se miden por horas. Minutos que se prestan y se recuperan.

Esta especie de cadena de favores podría llegar a Vitoria en breve. El grupo municipal de EB-Berdeak anunció ayer que planteará crear un banco del tiempo local en el pleno del Ayuntamiento que se celebrará el viernes. La concejala María José Ruiz explicó que la capital alavesa necesita llevar a cabo esta idea para mejorar «la colaboración, la convivencia y la solidaridad» entre los habitantes y las asociaciones. En definitiva, añadió, este sistema es la manera más fácil y barata de encontrar «a quien nos puede ayudar».

Por horas

El dinero no vale nada en el banco del tiempo. Los inscritos reciben una lista de habilidades disponibles y eligen una si creen que les va a suponer una solución.

«Vale lo mismo una hora de asesoría jurídica que una hora de cuidar niños, por ejemplo», explicó Ruiz, quien destacó que la clave está en buscar un equilibrio para que al final nadie salga beneficiado a costa de las buenas intenciones de algunos. «Si aporto veinte horas, también recibo otras veinte. El balance del saldo se informa en todo momento», matizó la edil.

Además, EB-Berdeak, cuya propuesta ha tenido «muy buena acogida» en PNV y EA, desea que la agencia de asociaciones y del voluntariado Erdu sea la encargada de gestionar este novedoso sistema de préstamo de horas.

Al mismo tiempo, Ruiz propuso que el Ayuntamiento de Vitoria aproveche su página web para crear un banco del tiempo en Internet con datos actualizados, como se hace en otras capitales. También contó con el apoyo de los medios de comunicación para dar luz verde a una iniciativa «muy positiva y que cueste muy poco».

La concejala asumió que habrá personas que crean que no pueden hacer nada especial por los demás. Ante esto, destacó que «todos tenemos habilidades» y dijo que el simple hecho de acompañar a alguien «puede ser algo muy importante para algunas personas».