Foto: AIPC Pandora

Cada vez es mayor el número de personas a las que les gustaría actuar como voluntarios y formar parte de algún proyecto internacional de cooperación. Sin embargo, la falta de tiempo o el tener que renunciar a un puesto de trabajo para hacerlo realidad supone un freno que, en muchas ocasiones, acaba por dar al traste con estas intenciones.

Por eso, los Microproyectos de Cooperación se erigen en una solución muy atractiva, pues se realizan durante las vacaciones de verano. Consisten en acciones de cooperación muy puntuales de 21 días de duración, que se enmarcan en proyectos de mayor envergadura que llevan a cabo organizaciones locales.

Gracias al boca a boca y a la buena experiencia que traen consigo los voluntarios a su regreso, estos microproyectos de cooperación están cobrando cada año mayor protagonismo y de ahí que la demanda esté subiendo progresivamente. ONG como AIPC Pandora (Asociación para la Integración y Progreso de las Culturas) llevan organizando este tipo de experiencias desde hace años y para este 2010 han organizado un total de 8 programas, el doble que en 2009.

El conocimiento acumulado permite mejorar el impacto de las intervenciones en las poblaciones locales y la experiencia de los voluntarios, y para este 2010 ofrecen la oportunidad de visitar colonias indígenas en Saraguro (Ecuador), vivir la realidad de la población albina en Tanzania, crear un aula de informática para invidentes con equipamiento específico en Perú o colaborar en la alfabetización de niños de Mali o Guatemala, por citar sólo algunos de los proyectos. Y todo ello, siempre partiendo de la base del turismo sostenible y conviviendo directamente con la población local, lo que supone un enriquecimiento cultural para las dos partes de gran valor.

En la página web de esta asociación pueden consultarse los programas detallados, y el próximo día 27 de enero (a las 19 h, en su sede de la calle Princesa, 82, Madrid) han organizado una reunión informativa para explicar todos los detalles y resolver las dudas a los asistentes.

Una forma diferente de viajar y descubrir el mundo en que vivimos que está teniendo una muy buena acogida y que es una opción muy interesante para aquellos que quieran aprovechar su tiempo libre de verano en acciones de solidaridad. Un sólo dato, entre el 60 y el 70% de las personas que prueban esta forma de viajar, repiten. Por algo será...

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